Pasar al contenido principal

FORMAR A TODOS LOS MIEMBROS DEL PUEBLO DE DIOS COMO DISCÍPULOS MISIONEROS Y CIUDADANOS

De modo que reflejemos formas sinodales de vivir y proceder, fomentemos los diversos carismas, vocaciones y ministerios, y demos testimonio de fraternidad, capacidad de diálogo, discernimiento y corresponsabilidad como servidores del Reino, en los diversos contextos urbanos y rurales de nuestro territorio.

img

 

img